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FRAMBUESAS Rubus idaeus

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Mayo

FRAMBUESAS Rubus idaeus

FRAMBUESAS. Rubus idaeus
Contenido: 1. Taxonomía. 2. Morfología de la frambuesa. 3. Requerimientos edafoclimáticos. 4. Riego. 5. Frutos. 6. Propagación. 7. Técnicas de cultivo para cultivares comerciales. 8- Para huertos pequeños y jardines. Cinco pasos para plantar frambuesos.9. Podas. 10. Nutrición y fertilización. 11. Plagas y enfermedades. 12. Principales variedades coerciales. 13. Cosecha y post-coscha.
1. Taxonomía: Familia: Rosaceae. Género: Rubus. Especie: R. idaeus. R. strigosus. R. occidentalis. R. neglectus. Nombre común. Frambuesa.
Al género Rubus pertenecen numerosas especies descritas, de las que sólo unas 331 son aceptadas. Las variedades más cultivadas actualmente son: Rubus idaeus (frambueso rojo nativo de Europa y del norte de Asia), Rubus strigosus (frambueso silvestre), Rubus occidentalis (frambueso negro) y Rubus neglectus (frambueso púrpura originario del norte de América).
Introducción Una de las berries con mayor demanda en el mercado mundial es la frambuesa (Rubus idaeus L.); un cultivo cuyo fruto se caracteriza por sus excelentes características nutracéuticas.
2. Morfología de la frambuesa La frambuesa pertenece a la familia Rosaceae y es un arbusto con tallo subterráneo, semileñoso, erecto y espinoso. El tallo cada año emite ramas aéreas conocidas como vástagos, las cuales se desarrollan durante el primer año y en el segundo año florecen, fructifican y mueren, siendo remplazados por nuevos vástagos. El fruto comestible es un agregado, es decir, está compuesto de la unión de drupelas (sin el receptáculo). Las cañas de la frambuesa se clasifican según su edad en primocañas y floricañas. Las primocañas son las cañas vegetativas y cuando entran a estado de floración son consideradas como floricañas; regularmente se presentan hasta el segundo año, ya que pasan por diferentes procesos como dormancia y diferenciación de yemas. Sin embargo, ya existen variedades que florecen y fructifican en primocañas y son las de mayor interés ya que no se tiene que esperar hasta un año para que comience su fructificación.
Otra clasificación de las cañas es de acuerdo a su hábito de crecimiento en erectas y rastrearas, siendo las cañas erectas las más importantes. Un tercera clasificación de las frambuesas según su hábito de producción es la producción en floricañas (verano del segundo año) y producción en primocañas (“otoño” del primer año). Clasificación según su época de producción - Reflorecientes, remontantes o bíferos: A este grupo pertenecen variedades que son capaces de fructificar dos veces durante el desarrollo del tallo. La primera cosecha tiene lugar en otoño sobre el extremo del tallo del primer año, y la segunda en verano sobre los tallos del segundo año. - No reflorecientes, no remontantes o uníferos: Son aquellas variedades que fructifican únicamente sobre el tallo del segundo año.
Existen dos tipos de variedades de frumbuesa: reflorecientes (remontantes) y no reflorecientes. Las reflorecientes producen dos cosechas anuales ya que dan su primera cosecha en la parte apical de la caña (tallo) y la segunda se produce en las yemas, además necesitan menos horas frio. En cambio las variedades no reflorecientes crecen el primer año y fructifican hasta el siguiente, y por lo general requieren soporte en V y poda después de la cosecha, además toleran la poda química. Las primeras tienen un rendimiento promedio de 15 a 20 t/ha y su periodo de plena producción se da en la segunda cosecha, mientras que las segundas tienen un rendimiento promedio de 10 a 20 t/ha y su periodo de plena producción es en el segundo año. Las variedades reflorecientes más comúnmente usadas son: Heritage, Summit, Autumn bliss, Polka, Sugana, Regina, Adelita y Kwanza. Las variedades comunes no reflorecientes son: Meerker, Glen Lyon, Glen Prosen, Malling Explot, Gradina, Tulameen y Tadmon.
3.Requerimientos edafoclimáticos- Temperatura: El frambueso es bastante resistente a las bajas temperaturas invernales y a los fuertes calores estivales. Las condiciones climáticas óptimas para su cultivo son las de inviernos con bajas temperaturas constantes, pero no excesivas, y veranos relativamente frescos, caracterizados por una cierta oscilación térmica entre el día y la noche. Por lo tanto, el rango de temperatura óptimo para que la producción sea mayor se encuentra entre 14-19ºC. Por otro lado, para romper la latencia del frambueso se necesitan 750-1700 horas-frío. Descensos fuertes de temperatura pueden dañar el extremo apical de los rebrotes más vigorosos todavía no lignificados. A partir de su entrada en vegetación, los efectos de una helada tardía pueden causarle gravísimos daños, perdiéndose gran parte de la floración precoz, lo cual puede repercutir también sobre la floración tardía. Durante el período de floración, el frambueso es muy sensible a bajas temperaturas primaverales, soportando el botón floral cerrado los -1,3ºC, la flor abierta -0,7ºC y el fruto recién cuajado los -0,7ºC. Las heladas tardías, pueden también perjudicar al fruto si coinciden con la maduración de éste. Por último, comentar que el clima influye fuertemente sobre algunas variedades para que se comporten como remontantes o no remontantes.- Humedad: Una humedad relativa elevada favorece el desarrollo del cultivo, pero no es conveniente durante la maduración del fruto.- Sustrato: El frambueso requiere de suelos sueltos, profundos, no compactos, con buena disponibilidad de humedad, alto contenido en materia orgánica, elevada capacidad de retención de agua y pH óptimo comprendido entre 6 y 6,8. Se deben evitar plantaciones en suelos arcillosos ya que éstos tienen a compactarse, pudiendo así producirse muertes por asfixia radicular ya que los frambuesos son muy sensibles al encharcamiento. Tampoco son adecuados los suelos demasiado sueltos, con elevados porcentajes de grava o arena, ya que pierden su fertilidad en un periodo corto de tiempo y requieren riegos muy frecuentes. Por tanto, un suelo de textura franco-arenosa o franco-arcilloso es el ideal para este cultivo.
4 Riego: El frambueso es una planta bastante resistente a la sequía. No obstante, el riego es importante para determinar una adecuada producción. El sistema de riego más habitual es el localizado. Durante el verano, la frecuencia de riego debe ser mayor con respecto a la del invierno, regando aproximadamente cada 15 días. En general, se estima que se necesita una dosis de 3500-7000m3/ha/año.
5. Fruto: El fruto, llamado frambuesa, está formado por numerosas drupas dispuestas en un receptáculo común llamado hipanto. Cada drupa se caracteriza por su forma convexa y deprimida y por su textura rugosa provista de un filamento amarillo. El fruto es pequeño, con forma cónica y aspecto aterciopelado. El color más común es el rojo o amarillento, pero existen variedades de frutos blancos y negros. El sabor de la frambuesa es agridulce.
6. Propagación Planta. La multiplicación de la planta se realiza principalmente por métodos de reproducción asexual y los tipos de plantas que se pueden utilizar después de la multiplicación son: raíz desnuda, maceta y bandeja de alveolos. Los últimos dos son los más recomendados debido a que se obtienen plántulas con mayor calidad y sanidad al ser reproducidos mediante propagación in vitro de tejidos, mientras las plantas a raíz desnuda son más susceptibles a contaminación por enfermedades.
La propagación del frambueso se puede llevar a cabo tanto de manera sexual como asexual. Sin embargo, la reproducción por semilla no se suele practicar debido a su dificultad, su alto coste y por no presentar fielmente los caracteres de sus progenitores. - Propagación mediante raíces: Para llevar a cabo esta técnica, el suelo debe ser suelto y con buena capacidad de drenaje, compuesto especialmente por arena y turba esterilizada. Una vez reparado el terreno, se procede a la siembra de porciones de raíces, de 10-15cm de longitud y 5mm de diámetro, previamente desinfectadas. Finalmente, las plántulas emergidas deben ser repicadas cuando contengan al menos 3-4 hojas para ser llevadas al terreno definitivo. - Propagación mediante brotes etiolados: Esta técnica es una modificación de la anterior, con el objetivo de conseguir plántulas con mayor sanidad y vigorosidad. Al igual que la técnica anterior, la plantación de raíces se suele realizar en invernadero sobre camas de 10cm de alto compuestas por turba y arena en una proporción 1:1. Las porciones de raíces deben ser de unos 10cm de longitud y 3mm de diámetro. Posteriormente, se procede a la siembra de dichas raíces a unos 4-5cm de profundidad, con el fin de inducir el desarrollo de la base etiolada del brote. Al cabo de unos 15-20 días, comienzan a emerger los brotes, siendo recolectados con 3-4 hojas. Finalmente, se trasplantan en bolsas de unos 8cm de diámetro. Es importante que el sustrato permanezca húmedo pero no en exceso, ya que un exceso de humedad podría ser perjudicial para un correcto enraizamiento. Al transcurrir mes y medio aproximadamente, la planta se encuentra en su momento óptimo para ser trasplantada definitivamente.
7. Técnicas de cultivo para cultivos comerciales - Preparación del terreno: Antes de llevar a cabo la plantación, es recomendable realizar un análisis de suelo y aplicar, si es necesario, cal o abonos minerales. A continuación, se debe realizar una labor de subsolado (40-50cm de profundidad) con objeto de aumentar la aireación y el drenaje del suelo. Seguidamente, se debe arar y aportar materia orgánica si ésta es inferior al 3%. No se puede precisar con exactitud la cantidad de estiércol a suministrar ya que varía según la naturaleza del terreno y su grado de fertilidad. Como media, se pueden enterrar 35-50 toneladas de estiércol maduro por hectárea a una profundidad de 50 cm. Finalmente, es necesario realizar un pase de fresadora para eliminar las malas hierbas ya que el frambueso es muy sensible a la competencia de vegetación espontánea. - Plantación: Se recomienda efectuar la plantación a finales de otoño (época vegetativa) o a principios de primavera si las condiciones son muy adversas. Las plantas empleadas deben proceder de viveros especializados y se deben plantar inmediatamente tras su recepción. En caso contrario, se tienen que proteger del sol y del viento, para evitar una posible deshidratación de las raíces. La distancia entre plantas debe ser la suficiente como para permitir el paso de maquinaria. Normalmente, se aconseja para el frambueso rojo una distancia entre filas de 2-3m en función de la fertilidad del terreno y del vigor del propio cultivar y una distancia entre plantas de 60-70cm. Para el frambueso negro se adoptan distancias medias de 3x1m, las cuales están indicadas para recolección mecanizada. La profundidad a la que deben colocarse las plantas debe ser de 15cm aproximadamente. A continuación, han de regarse para mejorar el arraigo en el suelo.
- Mulching: Esta labor consiste en extender superficialmente materiales inertes de distinta naturaleza (paja, virutas o serrín de madera o residuos de industrias alimentarias) sobre el suelo para conservar la humedad y reducir la actividad de las malas hierbas. Además, de esta forma también se enriquece el terreno en materia orgánica. El espesor del mulching debe ser al menos de 15cm, siendo preciso cada año añadir material nuevo sobre el anterior para sustituir la parte que se ha degradado por la acción de las bacterias del suelo. Se ha observado que con la aplicación de esta técnica se favorece el grosor y sabor de los frutos.
- Entutorado: Generalmente el frambueso necesita ser entutorado ya que sus tallos se curvan con facilidad bajo el peso de la vegetación (pudiendo llegar a fracturarse), dificultando así la recolección. Existen varios tipos de entutorado que dependen fundamentalmente del vigor de la variedad y del sistema de recolección, entre otros. 1. Método holandés: Consiste en colocar dos filas de alambre a cada lado de la hilera manteniendo la planta en el centro. La distancia entre filas debe ser de 40-50cm, cuyos alambres deben estar colocados a 0,8-1m y 1,4m de altura respecto al suelo. Este sistema apenas se utiliza debido a su dificultad para realizar las labores de cultivo y la recolección. 2. Entutorado en doble T: Consiste en colocar sobre un eje principal, generalmente de madera, dos postes en posición perpendicular. El poste inferior debe ser de 40cm y estar situado a 0,6m sobre el suelo. Por otro lado, el superior debe ser de 75cm y estar colocado a 1,6m del suelo. En cada extremo va sujeta una hilera de alambre galvanizado. 3. Entutorado en V: Consiste en colocar dos postes en forma de “V”, donde van sujetas dos hileras de alambre galvanizado a cada lado a una distancia de 0,6m y 1,6m sobre el suelo.
Riego. El manejo del agua en la frambuesa es crítico, ya que requiere una cantidad suficiente para llevar a cabo cada una de sus funciones metabólicas y fisiológicas, sin embargo, es una planta altamente susceptible a la asfixia radicular por lo que un exceso de humedad en el suelo o sustrato puede mermar la producción. Satisfacer las necesidades hídricas del cultivo se logra tomando en cuenta los requerimientos del cultivo, la evapotranspiración y el tipo de suelo. El riego se puede medir y monitorear mediante el uso de los sensores de humedad¸ además son herramientas que permiten decidir la frecuencia y cantidad de riego requerida para satisfacer la demanda de agua diaria del cultivo. El método más eficiente para proporcionar agua a la planta es el riego por goteo, y al mismo tiempo es una sistema que permite incorporar las fuentes de nutrientes al riego; a este técnica se le conoce como fertirrigación. Figura 4. Raleo de cañas (arriba) y retoños en la línea de plantación (abajo). - Riego: El frambueso es una planta bastante resistente a la sequía. No obstante, el riego es importante para determinar una adecuada producción.
El sistema de riego más habitual es el localizado. Durante el verano, la frecuencia de riego debe ser mayor con respecto a la del invierno, regando aproximadamente cada 15 días. En general, se estima que se necesita una dosis de 3500-7000m3/ha/año.
8. Para Huertos pequeños o plantaciones de jardín: 5 PASOS CLAVE PARA PLANTAR FRAMBUESAS: Aunque es una planta rústica que no exige muchos cuidados una vez ha arraigado, para que la frambuesa prospere hemos de prestar especial atención al momento del plantado. Algo que definirá tanto su buena salud como su crecimiento; pero que, sobre todo, será clave para poder recolectar sus frutos.
1. Cuándo plantar frambuesas y en qué tipo de climas: La planta de la frambuesa es oriunda de climas fríos por lo que las bajas temperaturas no son un enemigo para ellas. A pesar de sus altas necesidades de luz, en líneas generales no es la planta más idónea para climas templados. Y decimos esto porque, si vivimos en un lugar que reúna estas condiciones y encontramos en nuestro vivero una planta de frambuesa, podemos arriesgarnos a plantarla sin ningún tipo de problema: ya estará aclimatada y podrá arraigar para crecer. A la hora de plantar frambuesas, el momento idóneo es a mediados del invierno. Una época en la que el frío sigue estando presente pero comienza a desaparecer de manera paulatina. Si optamos por hacerlo en esta época del año, desde mediados de febrero hasta mediados de marzo, podremos ver la planta brotar y crecer durante la primavera.
2. Elegir la ubicación adecuada. A pesar de ser resistente a las bajas temperaturas, a la hora de plantar frambuesas tendremos que elegir un lugar soleado. Para que sus frutos puedan prosperar, la planta tendrá que estar expuesta diariamente a entre ocho y diez horas de sol directo. Es precisamente gracias a esto como las frambuesas mejorar su tamaño, sabor y jugosidad. Por otro lado, es importante también plantar frambuesas en un lugar protegido de vientos intensos. Dado que este arbusto se caracteriza por sus muchas ramificaciones, de estar expuesto al viento puede quebrarse y arruinar nuestra cosecha. Añadido, es vital que el lugar que elijamos para plantar frambuesas goce de un buen drenaje porque, a pesar de que necesita la humedad en el sustrato, es una planta enemiga del encharcamiento. Por esta razón, podemos plantearnos incluso plantarlas en lugares inclinados: gracias a esta pequeña pendiente del terreno, desaguará mejor el exceso de riego. Por último, tendremos que elegir un emplazamiento que permita crecer a sus anchas a la planta de frambuesa. Hay que tener en cuenta que es una planta que podría catalogarse de invasiva por su gran crecimiento de hijuelos que multiplican la planta, por lo que lo ideal es plantarla en un espacio en el que pueda desarrollarse a lo ancho sin dañar lo que tenga a su alrededor.
3. Opta por un sustrato rico Uno de los aspectos vitales para las frambuesas es el suelo en el que estén plantadas, ya que de él dependerá que dé sus frutos correctamente. Una razón de peso para que optemos por proveer a la planta de un sustrato suelto, que evite que el agua se encharque; con un pH neutro o ligeramente ácido, pero con una máxima fundamental: que sea rico en materia orgánica. Para plantar frambuesas, lo ideal es que optemos por un sustrato con una presencia mínima de arena enriquecido gracias a la mezcla con humus de lombriz. Un tándem perfecto para eliminar agua sin perder nutrientes ni ese grado de humedad que necesita. Pero más allá de estas características específicas del suelo, hay que contemplar otro aspecto casi tan importante: dónde no debemos plantar frambuesas. Empecemos por un espacio que tendremos que descartar: nunca debemos plantar frambuesas en un suelo que haya sido utilizado para cultivos de plantas solanáceas o moras en los últimos cinco años. Este tiempo es vital, ya que es el que tardan en morir algunas esporas de hongos y otros virus vegetales procedentes de este tipo de cultivos, entre los que se cuentan las patatas o los tomates. De aprovechar este espacio de siembra antes de ese tiempo de descanso, lo más normal será que la planta de frambuesa enferme y muera. Tampoco debemos plantar frambuesas en lugares en los que haya maleza perenne. La planta de la frambuesa, por sus características de crecimiento de la planta y de sus frutos, no puede encontrarse plantada en un lugar en el que pueda competir con otras plantas por los recursos hídricos. En caso de que el espacio del que dispongamos para plantar frambuesas tenga este tipo de malas hierbas, lo ideal no es solo cavar la tierra para arrancarlas sino complementar este gesto con un herbicida orgánico. Un producto que, por su origen natural, no supondrá ningún problema para nuestra cosecha de frambuesas.
4. Prepara correctamente el hoyo de plantado Si optamos por una planta joven, la profundidad ideal para plantar frambuesas es medio metro con respecto a la superficie. Un espacio idóneo para que tanto el cepellón de las raíces como una parte del tallo principal queden bien cubiertos con la tierra, un gesto que les dará una mayor sujeción. Pero incluso antes de plantar frambuesas, ese espacio debe recibir ciertos mimos. Lo ideal es que previo al plantado aprovechemos para abonar el terreno utilizando un producto específico para frutos rojos. De esta forma, estaremos enriqueciendo de nutrientes el espacio del que se alimentará una planta que cuenta con una demanda alta, sobre todo para poder dar frutos.
5. Planificar un sistema de tutores La planta de la frambuesa no deja de ser un arbusto que, en condiciones naturales, crece de manera salvaje. Un aspecto que marca en gran medida el carácter de la planta y su naturaleza, ya que no solo tiene un profuso no solo a lo ancho como acabamos de comentar sino también en altura. La planta de la frambuesa suele tener una envergadura media de metro y medio, aunque puede incluso superar esta altura. Por esta razón, es imprescindible que en el momento de plantar frambuesas planifiquemos también un aspecto fundamental: el sistema de sujeción para la planta. Cuando comience a crecer, sus ramas se doblarán con el peso. Para ayudarla a mantener la verticalidad, primero tendremos que plantear un sistema de tutores y, cuando la planta sea más adulta quizás usar un sistema de espaldera.
9. Poda. La poda en frambuesa tiene distintas finalidades, entre estas: sanitarias, estructurales, reproductivas y de cosecha. Las actividades se dividen por la temporada en que son efectuadas: invierno y verano. Las podas de invierno son: Sanitaria: se eliminan aquellas plantas enfermas, con mala apariencia y que alberguen plagas. Raleo: limita el número de cañas por metro cuadrado para proveer suficiente espacio de desarrollo, facilitar la cosecha y mejorar la entrada de luz. Se manejan de 20 a 25 cañas por metro cuadrado para una producción óptima. Rebaje: se realiza el despunte de las cañas en variedades reflorecientes que produjeron durante finales de verano y otoño con la finalidad de que la parte despuntada produzca fruto en los laterales de la siguiente temporada y se sugiere dejar al menos de 15 yemas o nudos. Cañas de segundo año: se identifican aquellas que terminaron su ciclo productivo y se eliminan para dejar espacio a los tallos de una nueva temporada. A piso: se realiza en variedades reflorecientes y se poda a ras del suelo para eliminar las cañas de primavera con el objetivo de concentrar la producción en el otoño. No se recomienda usar por mucho tiempo pues desgasta el nivel de reservas de las raíces. Entre las actividades de primavera están: la eliminación de retoños dentro de la línea de plantación, de primeros retoños, de retoños después de poda al piso, poda sanitarias y despuntes.
Poda: La poda en el frambueso depende de la variedad. En variedades remontantes, se deben realizar dos podas:
1) En invierno: Consiste en la eliminación de aproximadamente el tercio superior de aquellos tallos que han fructificado. El corte se debe realizar por debajo del racimo floral que fructificó. La parte resultante será la que dará fruto en la siguiente cosecha. Además, se debe eliminar el exceso de brotes, dejando 8-12 tallos por metro lineal para obtener una buena producción, y los tallos enfermos o débiles. 2) En verano: Se deben cortar todos los tallos a ras de suelo para favorecer así el crecimiento de nuevos brotes, los cuales darán lugar a la siguiente cosecha. En variedades no remontantes, se realiza una poda en invierno que consiste en despuntar los tallos a diferentes alturas para que la producción resultante sea escalonada. También se deben dejar de 8-12 tallos por metro lineal y eliminar aquellos que estén enfermos o débiles.
10. Nutrición. La absorción de nutrientes por la planta es de suma importancia para que pueda crear todas las estructuras vegetativas y reproductivas necesarias para producir los frutos. Los requerimientos de nutrientes para el cultivo de la frambuesa varían según la variedad y etapa en la que se encuentra el cultivo; una herramienta para evaluar la demanda del cultivo es el uso de las curvas de absorción y extracción nutrimental. Lograr rendimientos elites en la frambuesa es posible considerando y manejado adecuadamente los múltiples factores que intervienen en la producción, iniciando con un buen diagnóstico la fertilidad del suelo que permita determinar las dosis de enmiendas agrícolas o fertilizantes fuentes a aplicar. Para el monitoreo nutrimental de la frambuesa se tienen distintas herramientas como el extractor celular de peciolo (ECP), el extracto de pasta saturada, el tubo de acceso o chupatubos y el análisis foliar que permiten corregir y afinar los programas de nutrición del cultivo con la finalidad de lograr altos rendimientos y mejor la calidad del fruto. Fertilización: Para mantener un buen nivel de materia orgánica en el suelo se recomienda realizar aportes anuales de 15-20t/ha de estiércol bovino o de 10t/ha de gallinaza. También sería adecuado emplear 10t/ha de paja troceada. La fertilización mineral puede realizarse aplicando sulfato amónico o nitrato de calcio (400kg/ha) o urea (150-200kg/ha). Por otro lado, una aportación anual en primavera de un abono 10-10-10 a una dosis de 500kg/ha puede ser suficiente para asegurar una buena disponibilidad de elementos.
10. Plagas y enfermedades.. Plagas. Uno de los mayores desafíos en el cultivo de la frambuesa es el manejo integrado plagas (MIP), un concepto simple en teoría pero complejo en ejecución ya que abarca elementos como: prevención, monitoreo, nutrición adecuada del cultivo, prácticas culturales (rotación de cultivos, cultivos trampas, eliminación de malezas hospederas, etc.), control biológico y control químico.
Actualmente gran número de plagas atacan distintas partes de la planta y disminuyen la cantidad y calidad de frutos. Entre las que más afectan a la frambuesa son: la araña roja o de dos puntos (Tetranychus urticae), la mosca del vinagre (Drosophila suzukii), trips (Frankliniella occidentalis, Thrips tabaci), cabritos (Aegorhinus spp), mosca blanca (Trialeurodes vaporariorum, Bemisia tabaci), entre otras. La gran mayoría de los productores de frambuesa optan por el control químico como método para mantener umbrales bajos de plagas, sin embargo, el control efectivo de las plagas solo es posible mediante el uso de una combinación de diferentes herramientas y técnicas disponibles basadas en un análisis de beneficios/costos y priorizando el menor impacto negativo posible sobre el ecosistema. Alternativas como el control biológico mediante el uso de depredadores naturales, parasitoides y hongos entomopatógenos tienen resultados prometedores para el control de plagas en diferentes cultivos comerciales.
Enfermedades. Las enfermedades del cultivo de la frambuesa son variadas en cuanto al organismo que las provocan y al órgano que dañan, siendo las más importantes las que afectan al fruto y disminuyen su calidad organoléptica. Entre las más comunes están: roya (Pucciniastrum americanum) pudrición o moho gris (Botrytis cinerea), agallas de la corona (Agrobacterium tumefaciens), marchitez (Verticillum spp.), pudrición del cuello y raíces (Phytophthora spp.), oídio (Sphaeroteca macularis). Al igual que las plagas, el manejo integrado de enfermedades (MIE) es la estrategia más adecuada para combatir los organismos dañinos; el diagnóstico es el inicio de un buen manejo de la enfermedad, seguido del control cultural, control genético, control biológico y como último recurso el control químico. La selección de plantas sanas, el uso de variedades resistentes, las podas, la nutrición balanceada, el manejo del riego, entre otras, son prácticas comunes y cotidianas que pueden hacer la diferencia para disminuir la incidencia de enfermedades.
11. Control de malas hierbas: Es necesaria la eliminación de malas hierbas para reducir así la competencia entre plantas y prevenir la incidencia de plagas y enfermedades. Para ello, además del laboreo como método físico de eliminación de malas hierbas, es posible realizar un desyerbado químico mediante la aplicación de herbicidas de larga persistencia. En los suelos sueltos o en las calles, donde se realizan periódicamente cavas mecánicas, es conveniente no utilizar herbicidas de larga persistencia, ya que se corre el riesgo de entrar en contacto con las raíces de los frambuesos. Por ello, se recomienda emplear herbicidas de contacto. Las malezas se caracterizan por su reproducción temprana durante el ciclo biológico, gran producción de semillas, rápido crecimiento vegetativo, amplia dispersión, entre otras que hacen que su control sea crítico. Son 56 especies de malezas identificadas en berries en México, agrupadas en 23 familias, siendo las más representativas las gramíneas (Poaceae) y las compuestas (Asteraceae). El manejo de malezas mediante la integración del control cultural, mecánico, biológico y químico ofrece las herramientas para la manipulación de estas poblaciones de manera económica y sostenible. El manejo cultural de malezas en plantaciones de frambuesa incluye el uso de plántula certificada, adecuada distancia entre hileras y densidad de plantación, así como el acolchado. El control mecánico se basa principalmente en las escardas, mientras que el control químico exige necesariamente conocer la ecología-biología de las malezas presentes en nuestros lotes, la clasificación de herbicidas por su mecanismo de acción, la resistencia de malezas a herbicidas y el equipo para la aplicación de herbicidas, cuyo objetivo principal es lograr aplicaciones eficientes.Malezas. Las malezas o malas hierbas afectan al cultivo de una manera menos visible pero pueden generar mermas en el rendimiento hasta en un 28 %, ya que compiten directamente por nutrientes y agua con el cultivo, además son hospederas de insectos y patógenos.
12. Variedades comerciales del frambueso: Frambueso rojo. Cultivares uniferos: Mallin Promise. Mallin jewuel. Malling exploit. Malling Admiral. Newburgh. Williamette. Canby. Fairview. Sumper. Meeker. Bonanza. Puyallup. Schónemann. Glen Clova. Glen Moy. Glen prosen. Chilcotin. Skeena. Nootka. Haida. Veten. Cultivares reflorecientes: Lloyd George. September. Heritage. Zava refloreciente. Rossana. Baron de Wayre.
Frambueso negro: Munger. Bristol. Dundee. Evans. Morrisson.
Frambueso púrpura: Sosus. Marion. Clyde. Royalty
Para la elección de variedades se debe tener en cuenta las tendencias del mercado. La demanda de frutos redondos es mayor que la de frutos ovales y la de frutos rojos a la de amarillos, ya que éstas son más aromáticas.
Las variedades de objetivo industrial deben tener las siguientes características: - Resistencia a enfermedades. - Vástagos derechos, a ser posible verticales, para que permitan un laboreo del terreno entre las filas más cómodo y faciliten la recolección. - Renovación con vástagos de pie. - Frutos aromáticos, jugosos y color vivo. - Frutos maduros bien adheridos para resistir vientos y lluvias. - Frutos gruesos y con pulpa sólida para poderlos transportar y presentar correctamente en el mercado. - Planta resistente a heladas y no demasiado exigente en cuanto a suelo.
13. Cosecha y Postcosecha. La recolección se debe efectuar desprendiendo el conjunto de drupelas del receptáculo en las primeras horas del día para evitar altas temperaturas que puedan deshidratar el fruto, además tomar en cuenta la coloración del fruto para elegir el momento adecuado de cosecha. La frambuesa se debe cosechar madura o casi madura, ya que no sigue madurando después de la cosecha. Inmediatamente después de la cosecha se debe mantener en la sombra y nunca bajo el sol, y el proceso de enfriamiento y refrigeración se debe llevar a cabo lo más rápido posible, ya que un retraso de una hora en refrigeración puede significar una pérdida de un día de vida útil de la fruta. Cabe destacar que la frambuesa es una frutilla muy perecedera y se caracteriza por una vida muy corta (2 -5 días) después de la cosecha en condiciones óptimas de manejo. Después del corte las temperaturas de conservación recomendadas para consumo en fresco son de 0° y para congelado de -20 °C. La recolección de la frambuesa depende de si la variedad es remontante o no remontante. Además, dado al escalonamiento de la maduración, ésta se realiza en diversos pases (3-4 días entre pases). La época normal de producción es durante el verano. No obstante, dependiendo de la zona y del sistema de producción, esta época varía. La frambuesa es un fruto climatérico por lo que necesita ser cosechado en su momento óptimo, ya que una vez separado de la planta no madura. Para ello, el fruto debe caracterizarse por: color rojo brillante, pulpa firme, nula acidez y fácil desprendimiento del receptáculo. La cosecha puede ser mecanizada o manual, dependiendo del destino del mercado y siempre durante las primeras horas de la mañana. Si los frutos son destinados a la industria, la recolección es mecanizada. La maquinaria utilizada es de grandes dimensiones y trabaja a caballo en las hileras. Exigen la presencia de 5-6 personas, de las cuales dos se dedican a la conducción de la máquina y el resto a la selección de frutos. La hilera se peina por medio de dos altos rulos cilíndricos provistos de largos dientes metálicos que sacuden los tallos haciendo caer los frutos maduros sobre una plataforma retráctil. Mediante chorros de aire se eliminan las hojas y cuerpos extraños y los frutos llegan limpios a una larga lona móvil donde se realiza la selección final.
Fuentes consultadas para organizar y compendiar los datos de ésta ficha:
https://www.infoagro.com/frutas/frutas_tradicionales/frambueso.htm El Cultivo de la frambuesa.
https://www.intagri.com/articulos/frutillas/el-cultivo-de-la-frambuesa - https://www.portalfruticola.com/noticias/2019/06/10/frambuesa-guia-basica-para-el-manejo-del-cultivo/ Frambuesas. Guía básica para el manejo del cultivo
Manual de manejo agropecuario del frambueso. Carmen Gloria Morales et al.. Instituto de Desarrollo Agropecuario - Instituto de Investigaciones Agropecuarias Editora: Carmen Gloria Morales A. BOLETÍN INIA / N° 07 ISSN 0717 - 4829 Santiago de Chile 2017.
https://www.inia.cl/wp-Content/uploads/ManualesdeProduccion/07%20Manual%20Frambuesa.pdf
Manual de Frambuesa. Pablo Undurraga y Sigrid Vargas. Instituo Nacional de Investigaciones Agropecuarias Boletín 246 Chile. Centro de Investigacion Gilampu. Chillan. Chile. 2013. http://age.rus.uy/Manual%20de%20frambuesa.pdf
Guía para plantar frambuesas. https://verdecora.es/blog/guia-plantar-frambuesas
Manejo y Tecnología Postcosecha de Berries. Cita correcta de este artículo INTAGRI. 2017. El Cultivo de la Frambuesa. Serie Frutillas Núm. 13. Artículos Técnicos de INTAGRI. México. 7 p
DATA ORGANIZADA POR: RPERESBARBOSA. DR.. PARA ADQUIRIR PLANTAS DE FRAMBUESA Y OTRO TIPO DE FRUTALES PARA TODO TIPO DE CLIMAS VER: HTTPS://GREENMARKET.COM.MX

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